

A primera vista La Plata parece una ciudad muy estructurada en su diseño; con calles y diagonales detalladamente pensadas, sumadas a sus plazas y parques cada seis cuadras.
Pero quienes se animan a mirar más allá de lo evidente descubren que su trazado esconde secretos, historias curiosas y un aire de misterio que la convierten en un destino fascinante para explorar.
Como en muchas otras metrópolis del mundo, la reconocida ciudad de los “estudiantes” tiene una rica y variada historia unida a las Logias Masónicas, decantando en un mapa urbano lleno de mensajes ocultos (y no tantos para quienes saben observar).
La creación de la capital bonaerense fue pensada y fundada por reconocidos Masones que dejaron marcados para siempre su legado mediante simbología implícita y explícita principalmente en el diseño del actual Casco Urbano platense y en la imponente arquitectura de los edificios públicos, que están cargados de simbolismo y aún hoy perduran.
La leyenda cuenta que Dardo Rocha, fundador de la ciudad y Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, la ideó en base a la novela de Julio Verne “Los quinientos millones de la begún”, teniendo como principal hito el plano el plano del trazado de la ciudad (un cuadrado perfecto) que fue planificado por el Colegio de Ingenieros de la Provincia de Buenos Aires, dirigido por Pedro Benoit y otrora también Masón. Dentro de esta lógica podemos encontrar los símbolos más importantes de la masonería: compás y la escuadra.
Es interesante destacar que el mismo cuadrado fundacional, conformado por las avenidas de circunvalación (31, 32, 72 y 122), tiene un significado importante para los masones. El cuadrado es el símbolo de la Tierra y cada uno de sus lados representa a uno de los cuatro elementos: tierra, agua, fuego y aire.
La Plata cuenta con gran cantidad de diagonales mayores y menores. Siendo su función principal actual agilizar el tránsito, pero originalmente estuvo ligada a la corriente higienista de la época; que estaba atravesando una epidemia de cólera y fiebre amarilla, por lo que permitían la circulación del aire y evitaban la propagación de grandes enfermedades. Además, en estas calles que atraviesan distintos puntos de la ciudad, se puede encontrar (escondida) la lógica de los símbolos más importantes de la masonería: el compás y la escuadra.
Parece todo una fábula, pero hasta en esos detalles repararon sus creadores, que tan detallistas eran que hasta las baldosas de la veredas y los árboles tenían una lógica, según el tipo de calle y la ubicación.
Rincones con historia y misterio
Uno de los lugares que más intriga despierta es la Plaza Moreno, el corazón geográfico de la ciudad. Allí se enfrentan, cara a cara, la Catedral y la Municipalidad: una representación del poder espiritual y el poder terrenal. La Catedral, además de su imponente estilo neogótico, guarda detalles que muchos relacionan con códigos ocultos y simbología masónica.
Otro paseo que no puede faltar es el Cementerio de La Plata. Considerado uno de los más enigmáticos del país, está lleno de esculturas, ángeles, cruces y elementos que despiertan la imaginación. Algunos aseguran que ciertas tumbas están alineadas de forma especial y que hay mensajes cifrados en sus inscripciones.
Una propuesta turística diferente en Argentina
Hoy, La Plata es un punto de encuentro para los amantes del turismo distinto: el que busca historias fuera de lo común, el que se deja llevar por el misterio. Tanto para una escapada de fin de semana como para una salida distinta, La Plata ofrece un combo perfecto de cultura, historia y enigmas por resolver. Cada paseo puede revelar un nuevo secreto.
Todas esta historias se puede conocer más detalladamente en los walking tours gratuitas que realiza el Ente de Turismo municipal periódicamente (pudiéndose inscribir a través del link: https://bit.ly/WalkingTour2025 o en las visitas guiadas a la sede de la Gran Logia de Argentina de Libres y Aceptados Masones; todos los martes y jueves a las 16:00 horas, inscribiéndote al mail: tours@masoneria-argentina.org.ar